top of page
Foto .jpg

Sin abandonar mi profesión de médica, psicoanalista y creadora del modelo de Pensamiento en Red, hace casi veinte años me dedico a recorrer los múltiples espacios relacionados con el universo del tango: la música, el canto, el baile, la historia y la cultura. Escribí para la revista El Tangauta, publiqué el libro "El Bazar de los Abrazos. Crónicas milongueras" que fue traducido al alemán, inglés, sueco, italiano y francés. Algunos capítulos fueron traducidos a más de veinte idiomas. Además desarrollé varios guiones y presentaciones en diferentes ámbitos.
Tuve la alegría de recibir la Orden del Buzón del Museo Mano Blanca y un diploma de Ciudadana Ilustre del Barrio de Pompeya, por mi aporte a la cultura popular. 

 

  Un día alguien se olvidó una puerta abierta y descubrí la Milonga. Miré, escuché, aprendí a bailar, me contaron cosas, adiviné otras. Fue la experiencia y no la mirada fría y objetiva del investigador la que me despertó el deseo de contar. Frases y situaciones que surgieron oyendo confidencias, quejas, ocurrencias engendraron estos relatos.
Pregunté a los tantos extranjeros que venían a Buenos Aires a bailar por qué se habían apasionado de ese modo con nuestro tango. La respuesta era siempre la misma: por el abrazo.

  Hijo natural de una pasión con el tango, apadrinado por los milongueros, acunado por las bailarinas, nació este libro. 


Esta quinta edición es el reflejo de tantos lectores y bailarines que se encontraron en las páginas de mi Bazar, para los que lo extrañan en las librerías, y quieren leerlo y compartirlo en amorosa complicidad.


¿Dónde conseguís tu ejemplar? Estará disponible próximamente en todas las librerías del país.
La gran primicia... El sábado 29 de abril a las 19hs estaré charlando con ustedes y firmando libros, presentando la 5ta edición en la FERIA DEL LIBRO!
Pero, si estás des
esperado por tenerlo ya y estás en CABA, ¡Te lo mandamos nosotros! 
Pedilo al siguiente mail: elbazardelosabrazos23@gmail.com


O compralo por Mercado Libre: 

El Bazar de los abrazos-tapa frente.jpg

Aquí la columna, en Clics Tangueros por La2x4, de "El Bazar de los Abrazos - Crónicas Milongueras" 
"El libro de Sonia Abadi retrata el maravilloso mundo de las pistas de baile tangueras" Gabriel Cócaro 

¡A escuchar y compartir!

 

Tuve el placer de participar del Programa de Radio #PlumasBikinisYTango de @la2x4 con la conducción de Rómulo Berruti.
Donde estuve hablando de El Bazar de los Abrazos, una red secreta de múltiples vínculos. 
Si bailar un tango es una conversación de a dos, este encuentro fue otra manera de dialogo tan placentera como bailar un tango. 
¡Si te lo perdiste, esta es la oportunidad! ❗📣
Te dejo el link del programa  ▶️ para que lo puedas escuchar y compartir.

¡A escuchar y compartir!

¿Querés volver a evocar el evento de Espacio Aguaribay donde celebramos la 5ta Edición?

Aquí está la playlist 

COMENTARIOS DE LOS FANS DEL BAZAR 

Estimada Sonia Abadi,
He leído con sumo agrado su libro El Bazar de los Abrazos.
Se trata de una obra inusitada, cuando se lee desde afuera del contexto intransferiblemente porteño desde el que se desarrolla.
Afortunadamente para mí, esta condición de tanguero irremisible que me he acostumbrado a exhibir sin pudores, me permite hacerlo mío sin ninguna contradicción. Me admira la pintura perfecta, lo puntual y lo sagaz, en cada uno de los apuntes, retratos y hasta caricaturas, que se suceden en los distintos capítulos. Y dentro de esa pintura perfecta, para usar un término plástico, admirable es la magnífica sincronización de tono y anécdota.
En mis talleres de creación literaria vengo luchando desde hace años, por derrotar esa tendencia engañosa en la que incurre la inmensa mayoría: confundir con poder de síntesis el despojo liso y llano del entorno, la ausencia de decorado y de retrato, con lo que una buena anécdota queda colgada de la nada y actuada por seres abstractos.
Sus ambientaciones son concretas, suficientes, pero sin pormenores barroquistas. Sus personajes tienen perfil y frente. Son rotundos, contundentes, creíbles. Y por si fuera poco, la autora tiene un lirismo melancólico que, pese a los esfuerzos con los que se quiere refugiar en el escondite de la ironía, no logra reprimir y se le escapa en cada respiración, en cada pausa. (Esa es una actitud por demás rioplatense, tanguerísima).
Por ahí la anda esperando la poesía, amiga mía. Trate de no resistirse, por favor. Hay en su trabajo una irresistible sucesión de elementos poéticos: metáfora, anáfora, oxímoron, hipérbaton? hasta aliteraciones, tropo que no es frecuente encontrar en trabajos de prosa, por el riesgo que esta figura implica: caer en la cacofonía.
Más allá, también está la dramaturgia. Con esa capacidad para armar el personaje y la escena, no debería resultarle asombroso esta afirmación mía.
Finalmente debo declarar que, además de todo lo afirmado, que al fin y al cabo solo se refiere a la parte formal de su obra, o muy poco más, quiero decirle que me han sacudido muchas de sus sentencias, hábilmente esparcidas, economizadas con la sabiduría de quien sabe que no debe abrumar, a lo Viejo Vizcacha, al lector.
Gracias por decirme: Los chicos siguen naciendo y creciendo, los nuevos abuelos, más jóvenes que sus hijos, bailan.

Nelson Guerra, Maldonado, Uruguay. Escritor.

---

Querida Sonia (nuestra dulce walkiria)

Te tengo que agradecer el doble regalo que nos hiciste: tu libro y el placer de leerlo.
Con mi habitual compulsión a la incontinencia oral (o escrita) no resisto a la tentación de hacerte algunos comentarios.

1. La oralidad. Cuando se te lee se te oye. Aúnas: se te ve. Es una sensación inevitable. Se asocia un párrafo a una inflexión, un guiño cómplice, una sonrisa. Quizás a eso se refiera el “vuelo de pluma” de Marta.

2. El modo. Preciso y circulante. No busca la definición sino la analogía, el ejemplo, la metáfora. Una constelación de exactitudes reverbera alrededor del tema central iluminándolo y dejándolo milagrosamente intacto. La magia continúa. Es más el modo de un artista que de un científico (más de “fines” que de “géométrie”).

3. La mirada. En algún punto, inevitablemente, la de un “outsider”. Ese grado de lucidez no pareciera compatible con el cliché tanguero. Pero es esa visión tangencal la que ilumina la escena de un modo nuevo, revelando lo inesperado y lo obvio e inconfesable.

4.. La complicidad. Extraña sensación de quién te lee. Es indudablemente un cómplice. Pero, donde hay complicidad hay o hubo algún pecado, alguna transgresión. Cuál?
Creo imaginar qué es lo que me pasa. Nuestra generación asocia al tango alguna forma convencional de la adultez. La calle Corrientes (la calle y el programa), el Glostora Tango Club, los 8 Grandes Bailes 8, el Palacio de las Papas Fritas, la calle Lavalle los sábados a la noche, etc.
Pero quién recuerda esto recuerda también ese mundo despojado y delicioso en el que no había mucho más que la pollera cortona de Estercita (y el rayo de salen sus trenzas), el color de la tarde, y todo el cielo (tenemos tanto cielo en Buenos Aires!). Todo esto, lo oficial y lo íntimo, está secretamente atravesado por su pecado original. el tango no ha dejado de ser, ocultamente, lumpen, marginal, inconfesable, y quizás haya esto en sus entrañas que vive y que perdura.

5.. El “commentus interruptor”. Habría mucho más, pero quedé en cierto modo interdicto después de leer el capítulo dedicado al “verso”. Es que la dinámica del “verso” es preterintencional y casi compulsiva pero un señalamiento certero la paraliza. Mi natural pudor (y los envases plásticos) me impide continuar.

Te mando un beso grande. Esperemos vernos y, si querrás, “te la sigo”.

Gian

---

Querida Sonia:
He leído muy atentamente tu página y algunos fragmentos de tu libro El bazar de los abrazos. Me ha parecido maravilloso.
Me lo han recomendado muchas personas y lo han comentado en mi página de Internet. Los que bailamos tango entendemos ese abrazo que por las noches, vamos a buscar.

 

Corinne.

---

Sonia: ¿que tal? Soy Andrea de Montevideo estoy disfrutando tu libro, en mis clases estoy leyendo al inicio algún pasaje de tu libro y la verdad nos sentimos identificados en cada cosa.

Andrea. Montevideo-Uruguay.

---

Querida Sonia por conocer:
Te cuento ante todo que tu libro El bazar de los Abrazos fue el centro intelectual para una reunión íntima de amigos durante la noche de Año Nuevo. El texto lo leí yo en castellano, algunos pocos capítulos en voz alta, y te informo que la gente estaba subyugada, o fascinada quizá sea mejor expresión. Preguntaron cosas, y se sorprendieron de comprobar cuánta filosofía de la
  
vida existe en tus observaciones.
No hay duda que además de profesional tenés una gran capacidad de observación y una actitud poética respecto a todos tus relatos. En fin, quería contarte a qué ha dado lugar tu libro, en un lugar remoto del universo en el que también algunos despistado seguimos
tratando de bailar el tango.

 

Armando. Seattle-Estados Unidos

---

Estimada Sonia:
Quiero decirte que tu libro El bazar de los Abrazos está muy bueno, y que hay muchas cosas que nos identifican. Ya empezó a circular entre los AVALANCHEROS, y algunas cosas comienzan a compartirse en un espacio que tenemos dentro del taller el cual denominamos “redondilla”.
Gracias por compartir algo de tu vida, y desde este lado del charco te envío también un trocito de la mía con un fuerte abrazo y con el deseo de seguir comunicados, chan, chan.


Roberto. Montevideo-Uruguay

---

El Bazar de los Abrazos. Crónicas Milongueras
Un paseo de tu mano por la historia de los sentimientos, por las geografías humanas, por las pasiones de la luna. La vida me trajo para iniciarme en el tango de la manera más hermosa: con tus amigos, con tu libro, con tu canto, con tu compañía.

Llevo secretos, llevo reflejos, llevo leyendas, llevo ilusiones, llevo las noches íntimas de los aires ¡tan buenos aires!

 

Luis. Caracas-Venezuela

---

Estimada señora Abadi
Acabo de leer El bazar de los abrazos, una lectura que gocé desde la primera hasta la última palabra.

Un libro que es un reportaje irónico, respetuoso, una radiografía de sentimientos, una exposición de posturas. Un libro de comentarios despiadados y al mismo tiempo llenos de amor. Un reportaje que no es un reportaje: cada párrafo, por corto que sea, se lee como un cuento. Un libro de cuentos que son recuerdo y espejo al mismo tiempo.

 

Leopoldo. Ginebra-Suiza

---

Lo único que puedo decir es que lo compren, que lo lean! Un libro realmente maravilloso, que se disfruta en unos pocos viajes en ómnibus, y que luego querrás volver al comienzo una y otra vez. Algunos piensan que el tango en Buenos Aires es muy diferente al tango en Suecia, pero si crees lo que dice el libro te darás cuenta que la gente no es muy distinta. Cómpralo, léelo, disfrútalo, ríe y reconócete a ti mismo y a los demás.
 

Fredrika. Estocolmo-Suecia

---

He leído el libro durante mis horas sin respiro y me ha confirmado lo poco que entendía sobre tango, pero también me ha enseñado muchas otras cosas nuevas. Pídelo prestado, cómpralo o róbaselo a tu mejor amigo...pero léelo.

 

Thomas. Linköping-Suecia

bottom of page